Este reportaje de Centinela Covid-19 cuenta con el apoyo del Pulitzer Center on Crisis Reporting y de Oxfam.
En el contexto de la pandemia, Essalud, el ministerio de Salud y la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, por encargo del Minsa, compraron un total de 636 ventiladores mecánicos (544 ventiladores volumétricos y 92 de transporte), de los cuales solo llegaron al país 228. Se distribuyeron 135 y 93 fueron devueltos por no cumplir con las especificaciones técnicas estipuladas en el contrato.
Apenas tres días después de decretado el estado de emergencia nacional, el 19 de marzo, el Minsa hizo su primera compra: 35 ventiladores mecánicos marca Maquet, a la compañía Trademedic S.A.C. Perú, por un monto total de 6 millones 247 mil 500 soles.
Al menos 26 de esos ventiladores formaban parte de un lote que había sido previamente vendido al Consorcio Salud Tacna –empresa que tiene a su cargo la construcción del hospital Hipólito Unanue en esa región– por un precio unitario tres veces menor: 56 mil 469 soles. Es decir la empresa revendió los ventiladores al Estado, con un precio sobrevalorado, en el contexto de la pandemia.
De acuerdo con una investigación del programa periodístico Cuarto Poder, Trademedic resolvió el contrato con el Consorcio Salud Tacna, argumentando que este no había cumplido con sus obligaciones de pago. Luego, con la compra cancelada, le ofertó estos mismos ventiladores al Minsa pero con un precio unitario de 178 mil 550 soles (50 mil 028 dólares).
Los ventiladores fueron entregados al Minsa el 21 de marzo y trasladados al Hospital de Emergencias de Ate, en Lima. El 13 de abril la Contraloría General de la República advirtió que los equipos habían sido entregados incompletos e inoperativos. Josef Vallejos, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Ate, indicó a IDL-Reporteros que están operativos desde hace dos semanas aproximadamente: “No nos podíamos dar el lujo de tener 35 máquinas que estaban pasando como inoperativas. Hemos tenido que operativizarlas en tiempo récord”.
La Segunda Fiscalía Provincial Corporativa Especializada en delitos de Corrupción, a cargo del fiscal Reynaldo Abia, investiga el caso.
Esa fue la última compra de ventiladores mecánicos hecha directamente por el Minsa. El 23 de marzo, el Gobierno decidió delegar sus principales adquisiciones de salud a una entidad especializada en contrataciones públicas: la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (ARCC), adscrita a la Presidencia del Consejo de Ministros.
El Minsa había solicitado 501 ventiladores volumétricos, 62 ventiladores de transporte, 501 monitores de signos vitales de 8 parámetros, 501 aspiradores de secreción rodable, 62 electrocardiógrafos, 62 desfibriladores y 501 camas camillas para UCI. De estos, los equipos más urgentes eran los ventiladores mecánicos volumétricos.
Diez días después de encomendado el encargo de hacer las compras para el Minsa, la ARCC le compró a la empresa IQ Medical Services LLC. (proveedora de equipos y servicios médicos con sede en Miami) 450 ventiladores mecánicos marca Northern Meditec Limited, por 11 millones 227 mil 500 dólares.
“IQ Medical ganaba porque tenía un equipo en China que podía estar consiguiendo precios y costos. Así nosotros hacemos todas las cotizaciones y ciertamente gana (…) Hemos contratado 450, y el Minsa me había pedido 501. Entonces, nos quedaba 51 [por contratar] (…) y mi intención era que estos lleguen antes del 30 de mayo”, indicó Amaia Moreno, directora de la ARCC.
El 21 de abril, la ARCC compró los 51 ventiladores restantes a la compañía IQ Medical Services por 2 millones 65 mil 500 dólares. Estos respiradores llegarían al país más rápido: 31 ventiladores marca PuAO, la primera semana de mayo, y 20 ventiladores marca Prunus, la segunda semana del mismo mes.
Los primeros 31 ventiladores fueron devueltos debido a que la compañía incumplió con las especificaciones técnicas estipuladas en el contrato. El PEEP de los ventiladores estaba por debajo del rango requerido. La ARCC resolvió el contrato.
El 15 de mayo llegaron los 20 ventiladores marca Prunus. Según consta en el “Reporte de avance ante situaciones adversas N°002-2020-OCI/PCM-CC” de la Contraloría, estos tampoco cumplían “con la totalidad de especificaciones técnicas requeridas” relacionadas a los componentes y accesorios de los equipos.
Según el OFICIO N°583-2020-DG-HSR/MINSA, el ministerio de Salud concluyó que las observaciones respecto a las especificaciones técnicas no fueron subsanadas por la compañía pero que aún así los equipos podían cumplir con su principal objetivo, que era atender a pacientes con Covid-19. Los respiradores fueron distribuidos en hospitales de Trujillo (5), Piura (5) y Lima (10).
La ARCC suscribió una adenda al contrato con IQ Medical Services para modificar las especificaciones técnicas consideradas por el Minsa; y la empresa hizo una rebaja de 31 mil 400 dólares por las observaciones que no pudo subsanar.
El 06 de junio, el Minsa certificó la recepción de 50 ventiladores marca Northern Meditec Limited, comprados a la compañía IQ Medical Services. No hubo ningún inconveniente relacionado a este lote. Los ventiladores ya fueron distribuidos.
En total, la empresa IQ Medical Services le vendió al Estado 501 de los 544 de los ventiladores volumétricos adquiridos en el contexto del Covid-19 –es decir, el 92.1% del total–, a través del Minsa y la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios. De este grupo solo han llegado y se han distribuido 70 ventiladores.
Essalud, a su turno, solo compró 28 respiradores durante el Estado de Emergencia, de los cuales 20 ya fueron distribuidos entre los hospitales Guillermo Almenara, Edgardo Rebagliati y Alberto Sabogal. Estos ventiladores de transporte modelo Prisma Vent, utilizados para hacer los traslados de pacientes, fueron comprados a la empresa Invemet, por un precio unitario de 11 mil 200 dólares cada uno.
Los ocho ventiladores volumétricos restantes fueron comprados a la sucursal en Perú de la empresa alemana Dräger: cinco modelo Evita V500 y tres Evita V300, por un total de 388 mil 232 dólares en total. “Son los mejores que hay en el mercado […] nos han mantenido el precio”, dijo Ramos, “los precios que se están ofertando son altísimos, tengo un planillón de ofertas que han llegado de ventiladores de hasta 100 mil dólares, 75 mil dólares, 85 mil dólares por unidad”.
Entrevistado por IDL-R a inicios de junio, el gerente central de operaciones de Essalud, Óscar Ugarte, precisó que en su institución “hay un plan de compras de 368 ventiladores, de los que se inició la compra internacional de 120, pero fracasó. Ahora estamos en otro proceso de compra”.
Cabe mencionar que Essalud ya había comprado por su parte, el 9 de diciembre pasado, 94 ventiladores mecánicos de transporte –utilizados para hacer los traslados de pacientes– (por 2 millones 622 mil 604 soles) y 23 ventiladores neonatales pediátricos (por 2 millones 152 mil 804 soles) que llegaron al Perú la última semana de marzo. A este equipamiento ya disponible, Essalud logró sumar los ventiladores inoperativos que fueron reparados por la Marina de Guerra y la universidad Católica, que son alrededor de 40.